domingo, 28 de junio de 2020

EL CAMPO NO PARA NUNCA

En el campo no se para nunca. Da igual que haya festejos o no, siempre hay algo que hacer. 

Más allá de las labores que realizamos con los animales como saneamientos, cuidados veterinarios, la alimentación diaria, hay que estar siempre pendiente de mantener las instalaciones en el mejor estado posible.

La intemperie y el trato con los animales, hacen que puertas, vallados y cancelas estén sometidos a un desgaste y un deterioro permanentes.

Y es que la pereza o los descuidos se pagan caros puesto que las instalaciones de inmediato, pierden su funcionalidad y quedan inservibles haciendo muy difíciles y hasta imposibles, la realización de las tareas básicas de manejo.

Así que estos días nos hemos puesto a la faena y hemos comenzado una campaña de mantenimiento en la que estamos reparando principalmente puertas y cercados.

En Toros de Tierz, estas tareas nos sirven también para disfrutar de la amistad y poder hacer que los que sois habituales de la casa, sintáis la ganadería como propia.

Tal vez esto último sea lo que más me satisface en estos momentos en los que la posibilidad de lidiar los animales se presenta como una ilusión cada día más difícil.

Alimentar a los animales es una tarea diaria, pero hay otras más que no se pueden descuidar
Mantener los pesados portones de la placita de tientas

Hacer nuevos cercados para separar los lotes de cubrición

Reparar desperfectos y cubrir huecos...

... son tareas fundamentales que no se pueden descuidar.

Y claro, mientras los hombres trabajan, los novillos despreocupados, disfrutan de los pastos que todavía les ofrece la finca en estos primeros días del verano
Las vacas, rumian tranquilas y cuidan de las nuevas camadas de becerros
Y el joven semental, siempre alerta, ventea su harén seguro de que no tardará el momento en el que le toque intervenir